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viernes, 27 de septiembre de 2013

Capitulo 52

Siento el retraso!




-No es mecánico- afirma Beete.
-Diría que son insectos- añade Katniss- quizá escarabajos.
-Algo con pinzas- dice Finnick.
El sonido aumenta como si el causante de él se estuviera acercando.
-De todos modos, deberíamos irnos de aquí- digo- Queda menos de una hora para que empiecen los relámpagos.
Nos alejamos y hacemos un  picnic a pocos metros de allí. Beete le pide a Katniss que se suba a un árbol y que nos diga lo que ve. Esta al bajar unos minutos más tarde, nos cuenta en términos poco científicos como el rayo ha dado justo en el árbol donde estábamos antes.
Beete asimila todo y luego dice que va a trabajar con el cable. Mientras, nos turnamos para echar la siesta pero cuando llega la tarde estamos demasiado inquietos para seguir así. Y pensamos que es mejor aprovechar la última oportunidad de comer marisco. De este modo a las órdenes de Finnick arponeamos peces y recogemos ostras.
La mejor parte es bucear, los coloridos debajo del agua. La manera de nadar de los peces y los rayos del sol entrando en el agua dejando un rayo de luz. Es precioso.                                                                                   Me quedo vigilando mientras Finnick, Peeta y Katniss limpian el pescado y demás, y veo como  Peeta encuentra en una ostra una hermosa perla, que se la regala a Katniss.
Antes de empezar a comer cae un paracaídas con la misma cantidad de pan del distrito 3, con un suplemento de salsa picante de color rojo. Comemos y nos quedamos en un completo silencio, ni siquiera Peeta le habla a Katniss con la que esta de la mano sentados en la orilla. Quizas se peleraon ya que piensas que solo uno debe salir vivo de aquí. Me alegra la idea de su sorpresa al verse los dos fuera de la Arena, ambos vivos y juntos.
Qué envidia.
Suena a la noche el himno pero no sale ninguna cara en el cielo, no ha muerto hoy nadie. Los vigilantes estarán deseosos de ver cómo nos sale el plan. Salimos y nos dirigimos hacia el árbol del rayo, allí Beete se pone a prepararlo todo y cuando son las diez  y ya la ola pasa; se decide que Katniss y yo llevemos la bobina de alambre hasta el mar, pero nos recuerda que hay que salir de allí antes de que caiga el rayo.
-Quiero ir con ellas para protegerlas-dice Peeta sin apartar la mirada de su compañera.
-Eres demasiado lento-le dice Beete-Además, te necesito aquí. Katniss vigilara. No queda tiempo para discutirlo, lo siento.  Si las chicas quieren salir de esta con vida, tienen que irse ya.
Katniss se acerca al rubio y le tranquiliza, le da un beso y se gira hacia a mí.
-¿Lista?- me dice
-¿Por qué no? Tú vigilas, yo desenrollo. Después podemos cambiarnos- le contesto.
Caminamos sin hablar, y nos damos cuenta de que ya serán las once por el ruido del sector del bosque de al lado.
-Sera mejor que nos demos prisa- comento- Quiero estar bien lejos del agua antes de que caiga el rayo, por si Voltios ha hecho mal algún calculo o lo que sea- respondo con sinceridad.
-Llevare la bobina un rato- me dice.
-Toma- le digo.
Aun tenemos las dos la bobina en las manos, cuando una sacudida nos alerta de que el fino cable que hemos dejado atrás ha sido tocado o roto, lo que sea.

Alguien no muy lejos de nosotras ha cortado el alambre… y nos alcanzara en cualquier momento.

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