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lunes, 16 de junio de 2014

Capitulo 75


-Tu…- digo he instintivamente me coloco delante de Ethan- ¿Qué haces aquí?
-Mi madre tenía razón, la mala hierba nunca muere- dice con voz asqueada
-Si lo dices por ti no puedo estar más de acuerdo- y noto como Ethan intenta ponerse a mi lado, pero se lo impido.
-Además también decía que los cobardes suelen bromear minutos antes de morir. Como tu.-En ese momento Enobaria sonríe con sus dientes modificados y puntiagudos- Quiero venganza, y no me pienso ir de aquí sin ella.
-¿De qué habla Johanna?- me susurra Ethan
-¿No lo sabes? ¿Tan tonto eres que no sabes lo asesina que es tu estúpida novia? Anda ve y cuéntale.
Le miro no sin antes mirar con odio a Enobaria.
-En mis primeros juegos, mate a su hermana. La mate y disfrute, porque ella había matado a mi compañero de Distrito, y era ella o yo. Así eran y son los Juegos.-vuelvo a mirar a Enobaria. ¿Lo siento vale? No tengo culpa de las reglas de los Juegos, solo tengo lo culpa de haber disfruta de mi venganza. Pero a él lo dejas.

Sonríe, con malicia. Sé que como ataque estoy perdida seguro que esta armada y no solo me refiero a un arma sino que también tiene sus monstruosos dientes. No puedo permitir que le hagan daño a Ethan y menos por mi culpa.
-Vete- le digo en voz baja- Esto no tiene que ver contigo, vete.
-Ni de coña- me dice- mi lugar está aquí.- y se pone a mi altura, mientras me coge de la mano con fuerza.
-Qué bonito, el amor. – Salta Enobaria dando unos pasos hacia nosotros mientras saca una pistola- Una pena que no dure para siempre.- Apunta y dispara.

Y Ethan justo en ese momento cae. Y aunque no había soltado mi mano se había puesto delante para parar la bala.

Corro a pesar de que las lágrimas me nublan la vista, a sabiendas de que puedo recibir un balazo me lanzo contra Enobaria. Cuando la derribo ella ríe a carcajadas.
-¿Que se siente cuando tu mundo cae en pedazos bajo tus pies, Johanna?

Intento inmovilizarla, pero me lanza un bocado en el brazo que menos mal que le doy una patada para que la sanguijuela suelte. El grito que sale de mi garganta no sale porque se lanza contra mí.
No sé donde se encuentra la pistola, es un momento confuso mientras intento esquivar todos los golpes que me lanza o sus intentos de más bocados. La mayoría lo consigo, pero me estoy llevando una buena paliza, y estoy perdiendo sangre muy rápidamente.  Consigo en un momento ponerme arriba y empiezo a golpearla cada vez más fuerte. Pero no se cansa y consigue volver a dejarme en el suelo.
Voy a morir.
De esta no salgo, es imposible.

-Suéltala

Enobaria mira para arriba, y es mi momento. Ni lo pienso, cuando utilizo el arma favorita de Enobaria contra ella misma, los dientes. Le muerdo el cuello, asqueada, intentando olvidar el sabor en mi boca. Y solo la suelto cuando estoy segura de que ya no hará mucho.
Cuando me separo de ella, ella huye con ambas manos apretándose el cuello. Con dificultad se levanta y echa a correr sin mirar atrás.
Vuelvo la mirada hacia donde la voz estaba y veo a Ethan de rodillas con la camisa empapada de sangre, y con la pistola en las manos.  Ante mis ojos se desploma en el suelo, y cojeando corro hacia él.
Lo recojo, poniendo su cabeza en mis piernas
-Tengo frió- dice con los ojos buscando los míos.
-Lo sé, lo sé. Shhh, no te preocupes- le digo llorando- vas a estar bien vendrán a ayudarnos y te pondrás bueno.
-No mientas, se te da fatal- dice sonriendo.- Johanna
-¿Qué?
-Te quiero
-No me dejes, por favor, tú también no.- susurro rota
-Jamás lo hare. Estaré…siempre- tose violentamente-…junto a ti.
-Por favor- lloro- no, quédate, te necesito.
-Dilo-me dice
-Te quiero, Ethan, tanto que no puedo dejarte ir.- confieso abrazándole tan fuerte como para impedir que exista la mínima distancia entre nosotros, para no permitir ni siquiera a la muerte que también me lo robe.
-Pero debes hacerlo…-y se va quedando dormido, como un bebe en mis brazos

-No, no- No noto apenas su pulso, le cojo su cara en mis manos y con suavidad le beso empapándole de mis lágrimas- Te amo, te amo, te amo…


“Y así fue como Johanna Mason volvió a quedarse sola. Había encontrado el amor, un amor puro y verdadero que le fue arrebatado tan rápido que apenas lo vio venir. Y volvió a estar rota y vacía, como un muñeco desechado…
Había sobrevivido a dos Juegos del Hambre, a una guerra civil, a numerosos enfrentamientos, pero aun así….”



-Pero, yo no lo entiendo- dijo una niña de 5 años cruzando los brazos y poniendo una mueca seria, bueno intentándola.- ¿Y al abuelo cuando lo conociste?

5 comentarios:

  1. Pobre Johanna, odio a ennobaria, en serio, urg, ya me explicarás este final, me has dejado en ascuas con lo cría, ¿de quién es nieta? Tengo ganas de saber. :)

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    1. Holap:)
      Creo que el siguiente capitulo sera el definitivo lo intentare subir antes del viernes. Sera más largo pero intentare que este con todo detellas;)

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  2. asasdfsdf que bonitoooooooo*-* me ha encantado tu novelaa? ha acabado? pero porque tenia que morir ethan?:(((( celiaaa escribe otra historia de ljdh poorfa esta ha sido perfectaaa^^ . ¿te has pensado alguna vez escribgir en wattpad? alo mejor alli te leen mas personas?
    soy rosana

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  3. jajajajajajja hola!
    No no aun me queda explicar algunas cosillas:)
    otra de ljdh? pues nose lo que me he propuesto para este verano es una novela que yo misma he inventado desde el principio. No se como quedara, ni que haré después con ella.
    Te gusto de verdad?
    :)))))
    lo del wattpad como va¿

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  4. Ay CELIA!! Estoy llorando... mucho D:
    Primero Finnick, y ahora Ethan...
    Pero he de decir que me ha encantado la última frase *-*

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