Capitulo 4
Cuando termina, me voy directa a mi cuarto. Me quito el
vestido y cojo del armario una especie de camisa grande que me llega casi hasta
las rodillas. Me meto en la cama e intento no pensar en los tributos de este
año, así que me paso toda la noche acariciando el colgante de Caroline que aún
llevo puesto.
A la mañana siguiente alguien empieza a dar golpecitos en la
puerta-¡Despierta! ¡Despierta!
Genial, odio que me levanten temprano. Me voy al cuarto de
baño y cuando estoy en la ducha me quedo en seco… ¿Pero cuántos endemoniados
botones tiene esta ducha? ¿Qué se supone que tengo que darles a todos y ver qué
pasa? Esto es cómico, seguro que han puesto una cámara para grabarme la cara de
tonta que debo tener encima en este preciso momento.
Cuando salgo tengo un olor a jazmín y a algo más pero no sé
qué es. Escojo del armario una blusa blanca y unos pantalones verdes cortos,
nunca los había visto tan cortos en mi distrito. Salgo y me dirijo al comedor
donde están Shirila, James y Blight que están desayunando en una mesa donde han
colocado varias fuentes de comida.
-Hola-Saludo al entrar y me siento al lado de James.
-Buenos días, recordar que mañana a esta hora estaremos en
el Capitolio-Nos dice Blight
-Antes de nada chicos, quiero deciros que es muy importante
que cuando estéis allí os comportéis de manera educada y respetuosa. ¿De
acuerdo?- Dice Shirila y tanto James como yo asentimos.
-¿Tenéis pensado aliaros en la arena?-Nos pregunta Blight
Y antes que pueda responder, James lo hace por mi.-Sí.- Y me
quedo mirándole hasta que me devuelve la mirada y dice.- ¿A que sí Johanna?- Y
sonríe
“Este pretende algo, y me está involucrando”
-Oh, sí claro.
-Perfecto.-Y eso es lo único que responde Blight
Al terminar nos quedamos James y yo en el salón, así que
aprovecho la oportunidad y mientras me siento en uno de los sillones le suelto
-¿Sabes que eres uno de los favoritos del capitolio?
Y mientras me siento frente a él, me responde.
-Ya, lo vi ayer en la televisión, en mi cuarto. Realmente
salgo muy guapo.
-Por favor, tú no te echas flores ¿verdad? Directamente el
jarrón entero, ¿y por qué demonios has dicho que seremos aliados?
-Porque somos del mismo distrito y tendremos que ayudarnos
-Descerebrado, ¿no ves que voy a morir de las primeras?
-Pues con más razón tenemos que ayudarnos. Mira yo seré
rápido y fuerte pero tú eres lista. Entonces qué me dices ¿te alias conmigo?- y
me ofrece una mano mientras me sonríe mirándome a los ojos
Me quedo algo absorta mirando sus ojos verdes y finalmente
le doy la mano- Trato hecho.
-Pero creo que por ahora no nos conviene que lo sepa todo el
mundo, así que mejor estaremos como antes.- Le digo yo
-Si así lo prefieres- Dice guiñándome un ojo
Me levanto y sé que mientras salgo él me observa. Hay algo
que no cuadra en todo este asunto así que será mejor vigilarlo de cerca.
Durante toda la tarde doy vueltas por el tren y después de la aburrida cena en
la que los comentarios son sobre qué hacer, cómo defendernos y de quienes
debemos tener cuidado, me voy a dormir. Pero antes de salir del comedor me fijo
que James no quita la mirada de mí. ¿Qué diablos pretende?
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